El vuelo 89 de Delta Air Lines con destino a Shanghái, un Boeing 777-200 con 181 pasajeros y tripulantes a bordo, regresó al aeropuerto internacional de Los Ángeles minutos después de despegar el martes.
El piloto reportó una falla en el compresor del motor derecho, daño que puede suceder por mal funcionamiento o por impacto de un objeto externo, como un ave. El daño puede reducir la propulsión del motor o, en el peor de los casos, provocar un incendio.
Los aviones pueden despegar cargados, pero si deben aterrizar prematuramente por una emergencia, podrían verse obligados a liberar combustible para ser más ligeros y no sufrir daños al impacto.
Los controladores aéreos preguntaron a la tripulación si querían regresar de inmediato al aeropuerto o dar vueltas sobre el océano para “esperar y quemar combustible”, según una grabación de la comunicación por radio. “Vamos a avanzar”, respondió el piloto o copiloto.
Sin embargo, el avión después arrojó combustible mientras sobrevolaba una zona urbana de Los Ángeles, para llegar al aeropuerto.
El combustible fue soltado en dos chorros y la nube se precipitó al mediodía sobre la ciudad de Cudahy y zonas próximas al condado Los Ángeles, a unos 21 kilómetros al este del aeropuerto.
El vapor del combustible afectó tres escuelas primarias del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles, y unos 20 campus más experimentaron algunos efectos del olor, informó el distrito en un comunicado.
El vapor causó irritación leve en la piel a 56 niños y adultos, pero nadie fue llevado al hospital y sólo fue necesario que se lavaran con jabón y agua, dijeron las autoridades.
Durante la noche, todas las escuelas fueron limpiadas y reabrieron el miércoles.
Delta Air Lines dijo que la aeronave aterrizó a salvo tras liberar el combustible, “que fue necesario como parte de un procedimiento normal para alcanzar un peso de aterrizaje seguro”. La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA por sus siglas en inglés) emprendió una investigación sobre el incidente.
“Hay procedimientos especiales para que una aeronave tire combustible cuando se dirige hacia un aeropuerto importante de Estados Unidos o cuando sale”, dijo la FAA en un comunicado. “Estos procedimientos prevén que el combustible sea arrojado sobre zonas despobladas ya designadas, típicamente desde grandes alturas para que el combustible se atomice y disperse antes de llegar al suelo”.
Fuente: AP, RT
Deja una respuesta