Esta iniciativa se fundamenta en una política más inclusiva, en el ánimo de una dinámica colaborativa de las mujeres privadas de libertad, que se distancia de antiguas usanzas de aprendizaje pasivo, fomentando la rehabilitación integral con dotación de capacidades que incrementen su inclusión social y laboral efectiva una vez finalizada la reclusión.
Debido al espacio reducido dentro del Buen Pastor la iniciativa favorecerá a 20 mujeres al año, con una paleta ampliada de enseñanza. La variedad de productos se extenderá a la confección de ropas, sábanas y toallas, cartones de empaques para regalos y accesorios decorativos de mesa, entre otras propuestas que estarán disponibles en un catálogo expositor.
El Ministerio de Justicia informó que este modelo cuenta con el apoyo del Comité Internacional de la Cruz Roja (CIRCR).
“Estamos apostando a productos comercializables que hacen la base de sostenibilidad del proyecto, ya no a un proyecto de simple capacitación de mujeres en la penitenciaría. Queremos que esta empresa vuele sola, produciendo ganancias. Sentimos confianza en nuestra gente; en los últimos 10 años pasaron 300 mujeres y solo dos volvieron a delinquir”, afirmó Thomas Ess, representantes del CIRCR, tras reunirse con la ministra, Cecilia Pérez.
Además, el encuentro contó con la participación del Viceministro de Política Criminal, Rubén Maciel Guerreño y de la Directora de Bienestar y Reinserción Social, Alejandra Mendoza.
Fuente: Agencia IP
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