«Esta resolución es nula de toda nulidad, nosotros habíamos presentado y planteamos la reposición de la providencia que señalaba fecha para la realización de la medida cautelar. La jueza tomó la decisión de no hacer lugar a la misma, pero desde ese momento quedó subsistente la apelación subsidiaria, desde el momento en que eso ocurrió no cabía ninguna posibilidad legal de llevar a cabo la imposición o no de la medida cautelar. También las defensas han recusado a la jueza por una manifiesta parcialidad y por motivos graves que afectan el derecho a la defensa porque no nos han permitido presentar el escrito antes de la realización de la audiencia, persistimos en esa situación pero no nos han hecho caso», aseveró.
«Hemos formulado la posición de que el Ministerio Público no ha aportado ningún solo elemento de convicción grave como para considerar justa o no una imposición de una medida cautelar. Nuestros clientes no tenían, antes de hoy, ninguna prohibición, no estaban detenidos, gozaban de libertad absoluta, podían haberse ido del país pero no lo hicieron», sostuvo Marin.
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