Desde Olimpia califican como malintencionados los rumores que surgieron en torno al estadio.
La dirigencia asegura que el proyecto avanza según el cronograma establecido, desmintiendo murmullos sobre posibles retrasos.
“El objetivo se mantiene firme: inaugurar el estadio en junio de 2029, un año antes del Mundial 2030”.
“El estadio no será de ningún presidente ni comisión, sino del pueblo olimpista”, indica parte del comunicado.
“En las últimas semanas, han circulado en redes y medios diversas informaciones incorrectas o malintencionadas, que buscan desacreditar los avances del proyecto y sembrar dudas sobre su ejecución”, menciona.
“Las obras avanzan con los ajustes naturales de un emprendimiento de esta envergadura, que involucra procesos de ingeniería, gestión, planificación y control de calidad”, finalmente.
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